miércoles, 31 de agosto de 2022

Los zancudos son como tu familia, joden mucho pero llevan tu sangre

Si estás en paz con tu conciencia ninguna palabra podrá hacerte daño

Exodo 28 1-43

 

Las vestiduras de los sacerdotes
(Ex. 39.1-31)

ÉXODO 28

1 Harás llegar delante de ti a Aarón tu hermano, y a sus hijos consigo, de entre los hijos de Israel, para que sean mis sacerdotes; a Aarón y a Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar hijos de Aarón. 2 Y harás vestiduras sagradas a Aarón tu hermano, para honra y hermosura. 3 Y tú hablarás a todos los sabios de corazón, a quienes yo he llenado de espíritu de sabiduría, para que hagan las vestiduras de Aarón, para consagrarle para que sea mi sacerdote. 4 Las vestiduras que harán son estas: el pectoral, el efod, el manto, la túnica bordada, la mitra y el cinturón. Hagan, pues, las vestiduras sagradas para Aarón tu hermano, y para sus hijos, para que sean mis sacerdotes.

5 Tomarán oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido, 6 y harán el efod de oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido, de obra primorosa. 7 Tendrá dos hombreras que se junten a sus dos extremos, y así se juntará. 8 Y su cinto de obra primorosa que estará sobre él, será de la misma obra, parte del mismo; de oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido. 9 Y tomarás dos piedras de ónice, y grabarás en ellas los nombres de los hijos de Israel; 10 seis de sus nombres en una piedra, y los otros seis nombres en la otra piedra, conforme al orden de nacimiento de ellos. 11 De obra de grabador en piedra, como grabaduras de sello, harás grabar las dos piedras con los nombres de los hijos de Israel; les harás alrededor engastes de oro. 12 Y pondrás las dos piedras sobre las hombreras del efod, para piedras memoriales a los hijos de Israel; y Aarón llevará los nombres de ellos delante de Jehová sobre sus dos hombros por memorial. 13 Harás, pues, los engastes de oro, 14 y dos cordones de oro fino, los cuales harás en forma de trenza; y fijarás los cordones de forma de trenza en los engastes.

15 Harás asimismo el pectoral del juicio de obra primorosa, lo harás conforme a la obra del efod, de oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido. 16 Será cuadrado y doble, de un palmo de largo y un palmo de ancho; 17 y lo llenarás de pedrería en cuatro hileras de piedras; una hilera de una piedra sárdica, un topacio y un carbunclo; 18 la segunda hilera, una esmeralda, un zafiro y un diamante; 19 la tercera hilera, un jacinto, una ágata y una amatista; 20 la cuarta hilera, un berilo, un ónice y un jaspe. Todas estarán montadas en engastes de oro. 21 Y las piedras serán según los nombres de los hijos de Israel, doce según sus nombres; como grabaduras de sello cada una con su nombre, serán según las doce tribus. 22 Harás también en el pectoral cordones de hechura de trenzas de oro fino. 23 Y harás en el pectoral dos anillos de oro, los cuales pondrás a los dos extremos del pectoral. 24 Y fijarás los dos cordones de oro en los dos anillos a los dos extremos del pectoral; 25 y pondrás los dos extremos de los dos cordones sobre los dos engastes, y los fijarás a las hombreras del efod en su parte delantera. 26 Harás también dos anillos de oro, los cuales pondrás a los dos extremos del pectoral, en su orilla que está al lado del efod hacia adentro. 27 Harás asimismo los dos anillos de oro, los cuales fijarás en la parte delantera de las dos hombreras del efod, hacia abajo, delante de su juntura sobre el cinto del efod. 28 Y juntarán el pectoral por sus anillos a los dos anillos del efod con un cordón de azul, para que esté sobre el cinto del efod, y no se separe el pectoral del efod. 29 Y llevará Aarón los nombres de los hijos de Israel en el pectoral del juicio sobre su corazón, cuando entre en el santuario, por memorial delante de Jehová continuamente. 30 Y pondrás en el pectoral del juicio Urim y Tumim, para que estén sobre el corazón de Aarón cuando entre delante de Jehová; y llevará siempre Aarón el juicio de los hijos de Israel sobre su corazón delante de Jehová.

31 Harás el manto del efod todo de azul; 32 y en medio de él por arriba habrá una abertura, la cual tendrá un borde alrededor de obra tejida, como el cuello de un coselete, para que no se rompa. 33 Y en sus orlas harás granadas de azul, púrpura y carmesí alrededor, y entre ellas campanillas de oro alrededor. 34 Una campanilla de oro y una granada, otra campanilla de oro y otra granada, en toda la orla del manto alrededor. 35 Y estará sobre Aarón cuando ministre; y se oirá su sonido cuando él entre en el santuario delante de Jehová y cuando salga, para que no muera.

36 Harás además una lámina de oro fino, y grabarás en ella como grabadura de sello, SANTIDAD A JEHOVÁ. 37 Y la pondrás con un cordón de azul, y estará sobre la mitra; por la parte delantera de la mitra estará. 38 Y estará sobre la frente de Aarón, y llevará Aarón las faltas cometidas en todas las cosas santas, que los hijos de Israel hubieren consagrado en todas sus santas ofrendas; y sobre su frente estará continuamente, para que obtengan gracia delante de Jehová.

39 Y bordarás una túnica de lino, y harás una mitra de lino; harás también un cinto de obra de recamador.

40 Y para los hijos de Aarón harás túnicas; también les harás cintos, y les harás tiaras para honra y hermosura. 41 Y con ellos vestirás a Aarón tu hermano, y a sus hijos con él; y los ungirás, y los consagrarás y santificarás, para que sean mis sacerdotes. 42 Y les harás calzoncillos de lino para cubrir su desnudez; serán desde los lomos hasta los muslos. 43 Y estarán sobre Aarón y sobre sus hijos cuando entren en el tabernáculo de reunión, o cuando se acerquen al altar para servir en el santuario, para que no lleven pecado y mueran. Es estatuto perpetuo para él, y para su descendencia después de él.

martes, 30 de agosto de 2022

La tristeza es causada por la inteligencia...


 

En los momentos difíciles mira al cielo...


 

Que nunca nos falten esas personas...

 

Exodo 27 1-21

 

El altar de bronce

(Ex. 38.1-7)

ÉXODO 27

1 Harás también un altar de madera de acacia de cinco codos de longitud, y de cinco codos de anchura; será cuadrado el altar, y su altura de tres codos. 2 Y le harás cuernos en sus cuatro esquinas; los cuernos serán parte del mismo; y lo cubrirás de bronce. 3 Harás también sus calderos para recoger la ceniza, y sus paletas, sus tazones, sus garfios y sus braseros; harás todos sus utensilios de bronce. 4 Y le harás un enrejado de bronce de obra de rejilla, y sobre la rejilla harás cuatro anillos de bronce a sus cuatro esquinas. 5 Y la pondrás dentro del cerco del altar abajo; y llegará la rejilla hasta la mitad del altar. 6 Harás también varas para el altar, varas de madera de acacia, las cuales cubrirás de bronce. 7 Y las varas se meterán por los anillos, y estarán aquellas varas a ambos lados del altar cuando sea llevado. 8 Lo harás hueco, de tablas; de la manera que te fue mostrado en el monte, así lo harás.

El atrio del tabernáculo

(Ex. 38.9-20)

9 Asimismo harás el atrio del tabernáculo. Al lado meridional, al sur, tendrá el atrio cortinas de lino torcido, de cien codos de longitud para un lado. 10 Sus veinte columnas y sus veinte basas serán de bronce; los capiteles de las columnas y sus molduras, de plata. 11 De la misma manera al lado del norte habrá a lo largo cortinas de cien codos de longitud, y sus veinte columnas con sus veinte basas de bronce; los capiteles de sus columnas y sus molduras, de plata. 12 El ancho del atrio, del lado occidental, tendrá cortinas de cincuenta codos; sus columnas diez, con sus diez basas. 13 Y en el ancho del atrio por el lado del oriente, al este, habrá cincuenta codos. 14 Las cortinas a un lado de la entrada serán de quince codos; sus columnas tres, con sus tres basas. 15 Y al otro lado, quince codos de cortinas; sus columnas tres, con sus tres basas. 16 Y para la puerta del atrio habrá una cortina de veinte codos, de azul, púrpura y carmesí, y lino torcido, de obra de recamador; sus columnas cuatro, con sus cuatro basas. 17 Todas las columnas alrededor del atrio estarán ceñidas de plata; sus capiteles de plata, y sus basas de bronce. 18 La longitud del atrio será de cien codos, y la anchura cincuenta por un lado y cincuenta por el otro, y la altura de cinco codos; sus cortinas de lino torcido, y sus basas de bronce. 19 Todos los utensilios del tabernáculo en todo su servicio, y todas sus estacas, y todas las estacas del atrio, serán de bronce.

Aceite para las lámparas

(Lv. 24.1-4)

20 Y mandarás a los hijos de Israel que te traigan aceite puro de olivas machacadas, para el alumbrado, para hacer arder continuamente las lámparas. 21 En el tabernáculo de reunión, afuera del velo que está delante del testimonio, las pondrá en orden Aarón y sus hijos para que ardan delante de Jehová desde la tarde hasta la mañana, como estatuto perpetuo de los hijos de Israel por sus generaciones.

domingo, 28 de agosto de 2022

Exodo 26 1-37

 

El tabernáculo

(Ex. 36.8-38)

ÉXODO 26

1 Harás el tabernáculo de diez cortinas de lino torcido, azul, púrpura y carmesí; y lo harás con querubines de obra primorosa. 2 La longitud de una cortina de veintiocho codos, y la anchura de la misma cortina de cuatro codos; todas las cortinas tendrán una misma medida. 3 Cinco cortinas estarán unidas una con la otra, y las otras cinco cortinas unidas una con la otra. 4 Y harás lazadas de azul en la orilla de la última cortina de la primera unión; lo mismo harás en la orilla de la cortina de la segunda unión. 5 Cincuenta lazadas harás en la primera cortina, y cincuenta lazadas harás en la orilla de la cortina que está en la segunda unión; las lazadas estarán contrapuestas la una a la otra. 6 Harás también cincuenta corchetes de oro, con los cuales enlazarás las cortinas la una con la otra, y se formará un tabernáculo. 7 Harás asimismo cortinas de pelo de cabra para una cubierta sobre el tabernáculo; once cortinas harás. 8 La longitud de cada cortina será de treinta codos, y la anchura de cada cortina de cuatro codos; una misma medida tendrán las once cortinas. 9 Y unirás cinco cortinas aparte y las otras seis cortinas aparte; y doblarás la sexta cortina en el frente del tabernáculo. 10 Y harás cincuenta lazadas en la orilla de la cortina, al borde en la unión, y cincuenta lazadas en la orilla de la cortina de la segunda unión.

11 Harás asimismo cincuenta corchetes de bronce, los cuales meterás por las lazadas; y enlazarás las uniones para que se haga una sola cubierta. 12 Y la parte que sobra en las cortinas de la tienda, la mitad de la cortina que sobra, colgará a espaldas del tabernáculo. 13 Y un codo de un lado, y otro codo del otro lado, que sobra a lo largo de las cortinas de la tienda, colgará sobre los lados del tabernáculo a un lado y al otro, para cubrirlo. 14 Harás también a la tienda una cubierta de pieles de carneros teñidas de rojo, y una cubierta de pieles de tejones encima.

15 Y harás para el tabernáculo tablas de madera de acacia, que estén derechas. 16 La longitud de cada tabla será de diez codos, y de codo y medio la anchura. 17 Dos espigas tendrá cada tabla, para unirlas una con otra; así harás todas las tablas del tabernáculo. 18 Harás, pues, las tablas del tabernáculo; veinte tablas al lado del mediodía, al sur. 19 Y harás cuarenta basas de plata debajo de las veinte tablas; dos basas debajo de una tabla para sus dos espigas, y dos basas debajo de otra tabla para sus dos espigas. 20 Y al otro lado del tabernáculo, al lado del norte, veinte tablas; 21 y sus cuarenta basas de plata; dos basas debajo de una tabla, y dos basas debajo de otra tabla. 22 Y para el lado posterior del tabernáculo, al occidente, harás seis tablas. 23 Harás además dos tablas para las esquinas del tabernáculo en los dos ángulos posteriores; 24 las cuales se unirán desde abajo, y asimismo se juntarán por su alto con un gozne; así será con las otras dos; serán para las dos esquinas. 25 De suerte que serán ocho tablas, con sus basas de plata, dieciséis basas; dos basas debajo de una tabla, y dos basas debajo de otra tabla. 26 Harás también cinco barras de madera de acacia, para las tablas de un lado del tabernáculo, 27 y cinco barras para las tablas del otro lado del tabernáculo, y cinco barras para las tablas del lado posterior del tabernáculo, al occidente. 28 Y la barra de en medio pasará por en medio de las tablas, de un extremo al otro. 29 Y cubrirás de oro las tablas, y harás sus anillos de oro para meter por ellos las barras; también cubrirás de oro las barras. 30 Y alzarás el tabernáculo conforme al modelo que te fue mostrado en el monte.

31 También harás un velo de azul, púrpura, carmesí y lino torcido; será hecho de obra primorosa, con querubines; 32 y lo pondrás sobre cuatro columnas de madera de acacia cubiertas de oro; sus capiteles de oro, sobre basas de plata. 33 Y pondrás el velo debajo de los corchetes, y meterás allí, del velo adentro, el arca del testimonio; y aquel velo os hará separación entre el lugar santo y el santísimo. 34 Pondrás el propiciatorio sobre el arca del testimonio en el lugar santísimo. 35 Y pondrás la mesa fuera del velo, y el candelero enfrente de la mesa al lado sur del tabernáculo; y pondrás la mesa al lado del norte.

36 Harás para la puerta del tabernáculo una cortina de azul, púrpura, carmesí y lino torcido, obra de recamador. 37 Y harás para la cortina cinco columnas de madera de acacia, las cuales cubrirás de oro, con sus capiteles de oro; y fundirás cinco basas de bronce para ellas.

miércoles, 24 de agosto de 2022

TRATAR DE SALVAR A ALGUIEN QUE NO LO DESEA

Tratar de salvar a alguien que no lo desea, ni te pide ayuda, es como aventarte al mar y querer rescatar a alguien con ansiedad y pánico que terminará ahogándote junto con ella, si no tenemos la experiencia para saber manejar esa situación.

Así en el día a día, cuando vemos a alguien que a nuestro parecer necesita ayuda para vivir mejor,  queremos resolverle la vida, pero que esa persona no pide ser ayudado, pues está cómodo o resignado a vivir de esa manera. Y nuestro empeño es tanto, que nos enrolamos con sus problemas y hasta nos sentimos culpables de lo que le pasa, sin entender que todo eso es la respuesta de sus propias decisiones,  recuerda que con frecuencia nos resistimos a  aquello que más necesitamos. 

Así que ¡¡¡deja a cada quien ser lo que quiere o necesita ser!!! 

👣 Dejando Huella
Tomado de la Web

Exodo 25 1-40

 

La ofrenda para el tabernáculo

(Ex. 35.4-9)

ÉXODO 25

1 Jehová habló a Moisés, diciendo: 2 Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda; de todo varón que la diere de su voluntad, de corazón, tomaréis mi ofrenda. 3 Esta es la ofrenda que tomaréis de ellos: oro, plata, cobre, 4 azul, púrpura, carmesí, lino fino, pelo de cabras, 5 pieles de carneros teñidas de rojo, pieles de tejones, madera de acacia, 6 aceite para el alumbrado, especias para el aceite de la unción y para el incienso aromático, 7 piedras de ónice, y piedras de engaste para el efod y para el pectoral. 8 Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos. 9 Conforme a todo lo que yo te muestre, el diseño del tabernáculo, y el diseño de todos sus utensilios, así lo haréis.

El arca del testimonio

(Ex. 37.1-9)

10 Harán también un arca de madera de acacia, cuya longitud será de dos codos y medio, su anchura de codo y medio, y su altura de codo y medio. 11 Y la cubrirás de oro puro por dentro y por fuera, y harás sobre ella una cornisa de oro alrededor. 12 Fundirás para ella cuatro anillos de oro, que pondrás en sus cuatro esquinas; dos anillos a un lado de ella, y dos anillos al otro lado. 13 Harás unas varas de madera de acacia, las cuales cubrirás de oro. 14 Y meterás las varas por los anillos a los lados del arca, para llevar el arca con ellas. 15 Las varas quedarán en los anillos del arca; no se quitarán de ella. 16 Y pondrás en el arca el testimonio que yo te daré. 17 Y harás un propiciatorio de oro fino, cuya longitud será de dos codos y medio, y su anchura de codo y medio. 18 Harás también dos querubines de oro; labrados a martillo los harás en los dos extremos del propiciatorio. 19 Harás, pues, un querubín en un extremo, y un querubín en el otro extremo; de una pieza con el propiciatorio harás los querubines en sus dos extremos. 20 Y los querubines extenderán por encima las alas, cubriendo con sus alas el propiciatorio; sus rostros el uno enfrente del otro, mirando al propiciatorio los rostros de los querubines. 21 Y pondrás el propiciatorio encima del arca, y en el arca pondrás el testimonio que yo te daré. 22 Y de allí me declararé a ti, y hablaré contigo de sobre el propiciatorio, de entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio, todo lo que yo te mandare para los hijos de Israel.

La mesa para el pan de la proposición

(Ex. 37.10-16)

23 Harás asimismo una mesa de madera de acacia; su longitud será de dos codos, y de un codo su anchura, y su altura de codo y medio. 24 Y la cubrirás de oro puro, y le harás una cornisa de oro alrededor. 25 Le harás también una moldura alrededor, de un palmo menor de anchura, y harás a la moldura una cornisa de oro alrededor. 26 Y le harás cuatro anillos de oro, los cuales pondrás en las cuatro esquinas que corresponden a sus cuatro patas. 27 Los anillos estarán debajo de la moldura, para lugares de las varas para llevar la mesa. 28 Harás las varas de madera de acacia, y las cubrirás de oro, y con ellas será llevada la mesa. 29 Harás también sus platos, sus cucharas, sus cubiertas y sus tazones, con que se libará; de oro fino los harás. 30 Y pondrás sobre la mesa el pan de la proposición delante de mí continuamente.

El candelero de oro

(Ex. 37.17-24)

31 Harás además un candelero de oro puro; labrado a martillo se hará el candelero; su pie, su caña, sus copas, sus manzanas y sus flores, serán de lo mismo. 32 Y saldrán seis brazos de sus lados; tres brazos del candelero a un lado, y tres brazos al otro lado. 33 Tres copas en forma de flor de almendro en un brazo, una manzana y una flor; y tres copas en forma de flor de almendro en otro brazo, una manzana y una flor; así en los seis brazos que salen del candelero; 34 y en la caña central del candelero cuatro copas en forma de flor de almendro, sus manzanas y sus flores. 35 Habrá una manzana debajo de dos brazos del mismo, otra manzana debajo de otros dos brazos del mismo, y otra manzana debajo de los otros dos brazos del mismo, así para los seis brazos que salen del candelero. 36 Sus manzanas y sus brazos serán de una pieza, todo ello una pieza labrada a martillo, de oro puro. 37 Y le harás siete lamparillas, las cuales encenderás para que alumbren hacia adelante. 38 También sus despabiladeras y sus platillos, de oro puro. 39 De un talento de oro fino lo harás, con todos estos utensilios. 40 Mira y hazlos conforme al modelo que te ha sido mostrado en el monte.

Exodo 24 1-18

 

Moisés y los ancianos en el Monte Sinaí

ÉXODO 24

1 Dijo Jehová a Moisés: Sube ante Jehová, tú, y Aarón, Nadab, y Abiú, y setenta de los ancianos de Israel; y os inclinaréis desde lejos. 2 Pero Moisés solo se acercará a Jehová; y ellos no se acerquen, ni suba el pueblo con él.

3 Y Moisés vino y contó al pueblo todas las palabras de Jehová, y todas las leyes; y todo el pueblo respondió a una voz, y dijo: Haremos todas las palabras que Jehová ha dicho. 4 Y Moisés escribió todas las palabras de Jehová, y levantándose de mañana edificó un altar al pie del monte, y doce columnas, según las doce tribus de Israel. 5 Y envió jóvenes de los hijos de Israel, los cuales ofrecieron holocaustos y becerros como sacrificios de paz a Jehová. 6 Y Moisés tomó la mitad de la sangre, y la puso en tazones, y esparció la otra mitad de la sangre sobre el altar. 7 Y tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: Haremos todas las cosas que Jehová ha dicho, y obedeceremos. 8 Entonces Moisés tomó la sangre y roció sobre el pueblo, y dijo: He aquí la sangre del pacto que Jehová ha hecho con vosotros sobre todas estas cosas.

9 Y subieron Moisés y Aarón, Nadab y Abiú, y setenta de los ancianos de Israel; 10 y vieron al Dios de Israel; y había debajo de sus pies como un embaldosado de zafiro, semejante al cielo cuando está sereno. 11 Mas no extendió su mano sobre los príncipes de los hijos de Israel; y vieron a Dios, y comieron y bebieron.

12 Entonces Jehová dijo a Moisés: Sube a mí al monte, y espera allá, y te daré tablas de piedra, y la ley, y mandamientos que he escrito para enseñarles. 13 Y se levantó Moisés con Josué su servidor, y Moisés subió al monte de Dios. 14 Y dijo a los ancianos: Esperadnos aquí hasta que volvamos a vosotros; y he aquí Aarón y Hur están con vosotros; el que tuviere asuntos, acuda a ellos.

15 Entonces Moisés subió al monte, y una nube cubrió el monte. 16 Y la gloria de Jehová reposó sobre el monte Sinaí, y la nube lo cubrió por seis días; y al séptimo día llamó a Moisés de en medio de la nube. 17 Y la apariencia de la gloria de Jehová era como un fuego abrasador en la cumbre del monte, a los ojos de los hijos de Israel. 18 Y entró Moisés en medio de la nube, y subió al monte; y estuvo Moisés en el monte cuarenta días y cuarenta noches.

domingo, 21 de agosto de 2022

AHI ESTÁ EL DETALLE.

AHÍ ESTÁ EL DETALLE...

Un amigo vino a mi casa a tomar café, nos sentamos y hablamos, hablando de la vida. A un cierto punto de la conversación, le dije: "voy a lavar los platos y vuelvo enseguida".

Él me miró como si le hubiera dicho que iba a construir un cohete espacial. Entonces me dijo con admiración pero un poco perplejo: "me alegra que ayude a su mujer, yo no ayudo porque cuando hago algo mi mujer no agradece. La semana pasada lavé el piso y ni un gracias."

Volví a sentarme con él y le expliqué que yo no "ayudo" a mi esposa. En realidad, mi mujer no necesita ayuda, ella necesita un socio. Yo soy un socio en casa y por vía de esa sociedad se dividen las funciones, pero no se trata de una "ayuda" como las tareas de casa.

Yo no ayudo a mi esposa a limpiar la casa porque yo también vivo aquí y es necesario que yo también limpie.

Yo no ayudo a mi mujer a cocinar porque yo también quiero comer y es necesario que yo también cocine.
Yo no ayudo a mi mujer a lavar los platos después de comer, porque yo también uso esos platos.

Yo no ayudo a mi esposa con sus hijos, porque también son mis hijos y mi trabajo es ser padre.

Yo no ayudo a mi mujer a lavar, extender o doblar la ropa, porque la ropa también es mía y de mis hijos.

Yo no soy una ayuda en el hogar, porque yo soy soy parte del hogar. Y con respecto a elogiar, le pregunté a mi amigo cuando fue la última vez que, después de que su mujer termine de limpiar la casa, lavar la ropa, cambiar las sábanas de la cama, bañarse en sus hijos, cocinar, organizar , etc., le dije gracias?

Pero un gracias del tipo: ¡Wow, cariño!¡Eres fantástica!!! ¿Eso te parece absurdo, extraño? Cuando usted, una vez en la vida, limpió el piso, esperabas en lo mínimo un premio de excelencia con mucha gloria... ¿Por qué?

No nos ayudamos, somos compañeros, un conjunto que hacen un todo. ¿Quieres recibir elogios? Elogia. ¿Quieres que te reconozcan y agradezcan?
Reconoce y agradece.

El cambio real de nuestra sociedad empieza en nuestros hogares, enseñémosle a nuestros hijos e hijas el real sentido del compañerismo!

En la lealtad no existen los grises...

Y cómo huir cuando no quedan islas para naufragar

Tener que medir constantemente...

viernes, 5 de agosto de 2022

¿Cuántos riñones tenemos?

 

"En la facultad de Medicina, el profesor se dirige a un alumno y le pregunta: —“¿Cuántos riñones tenemos?” —“¡Cuatro!”, responde el alumno. —“¿Cuatro?”, replica el profesor, arrogante, de esos que sienten placer en pisotear los errores de los alumnos. —“Traiga un fardo de pasto, pues tenemos un asno en la sala”, le ordena el profesor a su auxiliar. —“¡Y para mí un cafecito!”, replicó el alumno al auxiliar del maestro. El profesor se enojó y expulsó al alumno de la sala. El alumno era, por cierto, el humorista Aparicio Torelly Aporelly (1895-1971), más conocido como el “Barón de Itararé”. Al salir de la sala, todavía el alumno tuvo la audacia de corregir al furioso maestro: “Usted me preguntó cuántos riñones ‘tenemos’. ‘Tenemos’ cuatro: dos míos y dos suyos. ‘Tenemos’ es una expresión usada para el plural. Que tenga un buen provecho y disfrute del pasto”. La vida exige mucho más comprensión que conocimiento. A veces, las personas, por tener un poco más de conocimiento o ‘creer’ que lo tienen, se sienten con derecho de subestimar a los demás." Autor: desconocido Imagen: web

miércoles, 3 de agosto de 2022

ALZHEIMER

ALZHEIMER
Va Cindi tranquila por la av. del Taller, cerca del parque del obrero, aquí en la ciudad de México, de pronto no recuerda a dónde va y lo peor, ni cómo se llama. Ella siente miedo y sigue caminando hasta llegar hasta esa taquería que hay en la esquina de la calle Compás, se sienta y pide una vaso con agua.

Un rato pasa, como diez minutos y recuerda que encargó hace un momento un arreglo floral en la calle Yunque, que es cumpleaños de su madre y arreglaba la casa antes que lleguen los invitados.

Ella recogió las flores, va a su casa que es cerca del mercado Sonora y ve un desorden total,... el cumpleaños fue ayer, pero no recuerda mucho, algunos sucesos de la fiesta le llegan borrosas a su memoria.

Se sienta un rato en una silla, medita y decide buscar a su mejor amiga Ana Carolina, platica más de lo normal con ella, le tiene más confianza que a su propia familia y le pide mil cosas, como que si llega a olvidar un día, le recuerde lo mucho que le gustaba tocar la guitarra y le repita su nombre una y otra vez.

Tiene tanto miedo de olvidar las cosas cotidianas que le pide que cuando llegue el momento, le recuerde sus más grandes sueños y sus peores derrotas. Que si olvida a su más grande amor, que es su hijo, lo lleve ante él, lo haga abrazarlo y tal vez sienta el amor si éste traspasa las barreras de la memoria.

Pero Cindi sale nuevamente a la calle, se ha propuesto sonreírle a todo el mundo para que la sonrisa se quede grabada en su rostro. Al volver a casa nuevamente, le da las llaves de su habitación a su madre, le dice que si algún día decide irse de casa, que la encierre y bote la llave... y mamá la mira con mucha gracia.

Más tarde se duerme pensando en decirle mañana a Ana Carolina, que le recuerde lo mucho que le gusta pasear por la playa sin zapatos y Ana va más allá al planear un viaje a Acapulco para fin del mes, que finalmente esta a unas pocas horas... El mar, testigo de sus más grandes aventuras y donde conoció el amor la primera vez.

Si un día la veis por la calle caminando sin rumbo, no le tengáis lástima y regaladle una sonrisa.

( con cariño a quienes tienen o han tenido un ser querido que olvidó sus vivencias).

El tiempo pone cada cosa en su lugar...

 



martes, 2 de agosto de 2022

Hermosa naturaleza...a cuidarla

Una vez que comienzas a avanzar hacia el desapego...

EL DESAPEGO
El desapego duele y duele mucho...
Duele porque hay que soltar lo que amas, dejarlo ir...
Eso es lo que creemos, pero ese dolor es mental, no es dolor, es sufrimiento...
Lo que nos hace sufrir es el miedo alimentado del ego por la creencia arraigada de la posible pérdida de una posesión que no existe, que no es real...
Ya que no podemos poseer a alguien que no es nuestro, que nunca lo fue y que nunca lo será...
No nos pertenecen nuestros padres, ni nuestros amigos, ni nuestra pareja, ni siquiera nos pertenecen nuestros hijos...
Son seres libres e independientes, con su propio camino por recorrer, al igual que nosotros...
Por eso no hay que subyugar la felicidad de unos hacía los otros. Si no eres feliz tu mismo, no lo serás con nadie...
El apego es el controlador de todos los tiempos, el que te ancla en un presente ausente, sin embargo el desapego te mantiene en el aquí y el ahora...
Es soltar al otro, sabiendo que pase lo que pase...
–TODO ES PERFECTO–
Y sí, puede que eso "nos duela mucho"...
Porque hasta ahora sólo nos enseñaron que éramos alguien si teníamos posesiones, de todo tipo...
Se olvidaron de decirnos que cuanto más poseemos, más esclavos nos volvemos...
Como dijo Frida Kahlo:
"De nada sirve que la imaginación tenga alas, si el corazón es una jaula".
Por eso creo con firmeza que la independencia afectiva, es el mayor regalo que puedes hacerte, a ti y a tus seres amados...
Y cuando lo logras, entonces y sólo entonces, puedes gritar al Universo, que por fin has alcanzado la verdadera y plena libertad.
"Una vez que comienzas a avanzar hacía el desapego, ya no existe camino de retorno..."
El Desapego es desprenderme de todo con facilidad, sabiendo que nada sale de mi vida si no que todo fluye y eso genera abundancia ...

ABRE LAS VENTANAS CUANDO LLUEVA.


ABRE LAS VENTANAS CUANDO LLUEVA.

Generalmente, tenemos la costumbre de cerrar las ventanas apenas llueve; es un error que muchos cometemos, si llueve en una época en la que no hace frío, podemos abrir por lo menos unos minutos las ventanas.

La lluvia trae un efecto de oxigenar y por lo tanto purificar el aire de nuestro hogar, ese "olor a lluvia" debemos dejarlo entrar a nuestro hogar.

Cuando llueve, huele a ozono y estas partículas limpian el aire de nuestra casa.

Todos lo hemos olido, poco tiempo antes de que se desate una tormenta lo sentimos, es un olor metálico muy característico, y entonces lo decimos sin ninguna duda: “Va a llover”.
El olor tan especial antes de una tormenta proviene del ozono, esta molécula siempre está presente en la atmósfera, pero su concentración en las zonas bajas aumenta en los días de tormenta, sucede porque los rayos favorecen su formación.

La lluvia, el agua elemento purificador, que limpia, arrastra todo lo malo...

Ya lo sabes, cuando llueva abre las ventanas, deja que fluya el oxígeno, que salgan las viejas energías y entren las nuevas con la lluvia.