Me gusta volver a las ardillas del Central Park y a las maravillas de Paul Klee, Modigliani, Matisse y Picasso en el Museo de Arte Moderno. Me excita Nueva York, donde se juntan lo mejor y lo peor del mundo, donde la elegancia no hace caso del cuchillo en el sombrero. Hace algún tiempo, después de un concierto que ofrecimos con Alberto en el Lincoln Center un periodista del New York Time me dijo: Estoy de acuerdo en que Dios es siempre justo; a veces ando como distraído. Le pedí un ejemplo de lo que digo, si Dios estuviera siempre atento y fuera siempre justo. Usted debería tener tanta difusión y tanto éxito como Julio Iglesias. Usted cree que Dios sabe todo? Le pregunté y él me dijo: por supuesto!
Entonces, le dije, Dios sabe que Julio necesita más dinero que yo para vivir, por eso le dio más éxito, pero Dios también sabe que yo necesito más libertad que Julio para vivir, por eso me hizo más libre. F,C.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario