Un día estaba tomando café en San José de Costa Rica, donde vamos esta tarde y había una gringa al lado (no sé cómo le llaman ustedes) una norteamericana, una gringa, la mujer más bella que vi en mi vida, este… que fue otro milagro. Mi mujer… cuando yo la conocí a ella, quince días atrás había sido portada de Playboy y una foto de ella desnuda mostrando su belleza porque pensaban que era de ella, ella pensaba que su belleza era obra de ella y estaba hasta la cabeza con la droga. El amor es extraordinario, el amor no anda buscando situaciones ideales, uno ama, no sabes por qué?
Mi madre me decía: No busques a tu mujer, porque Dios te la va a poner ahí. Vas a saber que es tu mujer. No sé cómo se sabe eso, porque yo hablaba poco inglés y ella nada de español. Estaba sentado al lado y le dije: “Oye tu eres mi mujer” (aplausos y risas) Y ella lo sabía, ese es Dios.
Y ella me dijo: “Si soy tu mujer”, extraordinario, yo tenía 40 años, ella 20...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario