domingo, 10 de mayo de 2015

El Salmo de la Madre 139.13



Salmo 139 

13.Pues eres tú quien formó mis riñones, quien me tejió en el seno de mi madre. 

14.Te doy gracias por tantas maravillas, admirables son tus obras y mi alma bien lo sabe. 

15.Mis huesos no te estaban ocultos cuando yo era formado en el secreto, o bordado en lo profundo de la tierra. 

16.Tus ojos veían todos mis días, todos ya estaban escritos en tu libro y contados antes que existiera uno de ellos. 

17.¡Tus pensamientos, Dios, cuanto me superan, qué impresionante es su conjunto! 

18.¿Pormenorizarlos? Son más que las arenas, nunca terminaré de estar contigo. 

19.¡Ojalá, oh Dios, mataras al malvado y se alejaran de mí los sanguinarios, 

20.arman maquinaciones en tu contra y no toman en cuenta tus declaraciones! 

21.Señor, ¿no debo odiar a los que te odian y estar hastiado de los que te atacan? 

22.Con un odio perfecto yo los odio y para mí también son enemigos. 

23.Examíname, oh Dios, mira mi corazón, ponme a prueba y conoce mi inquietud; 

24.fíjate si es que voy por mal camino y condúceme por la antigua senda. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario