Llegaste a un mundo fantástico Juan Francisco un mundo que tiene mares donde estallan olas hasta de 200 metros de altura que avanzan a más de 600 km por hora y mares donde descansan barcos piratas llenos de oro que no interesan a magníficos tiburones que alguna vez vieron a una ballena blanca y mares por donde anduvo a la deriva Noe, donde Dios comenzó todo de nuevo y mares por los que los vikingos llegaron más lejos que nadie y mares que llevaron a Marco Polo de sorpresa en sorpresa y mares que se hicieron uno para que llegara Colón a confundir a los indígenas que lo creyeron un regalo de los Dioses.
En este mundo fantástico aparecen y desaparecen oasis y las arañas tejen trampas mortales entre insectos que a veces tienen mil patas y las elefantas necesitan 22 meses para parir una cría de 90 kilos en la India donde en la antigua leyenda dice: que antes del principio del tiempo no existía nada, solo el si mismo en forma de hombre que al ver al vacío gritó: ¡eso también soy yo! Y tuvo miedo, pero lo racional que no había nadie, el miedo desapareció, pero se aburría, por eso deseó que existiera otro entonces se hinchó tanto que explotó y al partirse en dos se convirtió en masculino y femenino, y en el abrazo que el masculino le dio al femenino comenzó la raza humana, pero ella pensó ¿Cómo puede unirse conmigo si soy su propia sustancia? Y para ocultarse se convirtió en vaca pero él se convirtió en toro y de los dos nació el ganado, entonces se convirtió en yegua y así hasta llegar a las hormigas, entonces el comprendió… soy creación pues de mi nació todo. Cualquiera que entienda esto dicen los viejos maestros del oriente, se convertirá en creador...(Continúa parte 3)
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