viernes, 28 de septiembre de 2018

10 CONSEJOS PARA UNA VIDA CON ÉXITO. RECONOCE TU RIQUEZA.. Facundo Cabral. Transcripción Juana Macedo


RECONOCE TU RIQUEZA. 

Ricos y pobres, en mi país están discutiendo las clases sociales, todavía hablan de oligarcas, de ricos y de pobres cuando todos tenemos corazón, alma, cerebro, espíritu y nos rodean cinco continentes, más la imaginación, es casi una herejía ser pobre con tanta fortuna, Dios te puso las cosas en la mano, yo que al principio yo pensé que era un tipo de izquierda, es muy curioso esto, es más todavía hay mucha gente que piensa, aunque nunca fui a Cuba, me echaron de la Rusia comunista, de la China de Mao tse tung, pero no importa y de pronto empecé a conocer a la mayoría y como no se dan cuenta que somos naturalmente ricos, no sé si vos conoces, no estoy seguro, pero yo escribí una vez una parábola, al estilo bíblico, mucha gente incluso cree que es bíblica. 

Te la puedo decir… Mira mi madre, yo la ví comer de la basura a mi madre y antes se arrodillaba y daba las gracias y dije: Mi Dios una mujer con semejante aristocracia espiritual, terminó comiendo con Rayniero mi madre y con Grace Kelly y con los que te imagines, con Rockefeller que se yo, con los Ford. Mi madre decía, no hay pobres, no crea nosotros vivíamos en la miseria, no teníamos casa, se murieron 4 de hambre y de frio cruzando la Patagonia en 9 años por ejemplo, “No hay pobres, hay gente que no piensa”, la parábola decía: 

“Dios tomó forma de mendigo y bajo al pueblo, buscó la casa del zapatero y le dijo; 

-Hermano no tengo una sola moneda encima y estas son mis únicas sandalias y están rotas, si vos me hicieras el favor. 

El zapatero le dijo: 

-Estoy cansado que todos vengan a pedir y nadie a dar. 

El Señor le dijo: 

-Yo puedo darte lo que vos necesitas. 

El zapatero desconfiado, viendo al mendigo, le preguntó: 

–Vos podrías darme el millón de dólares que yo necesito para ser feliz? 

Yo puedo darte diez veces más que eso, pero a cambio de algo. 

-¿A cambio de qué?, preguntó el zapatero 

- A cambio de tu pierna, 

El zapatero preguntó: ¿Para qué quiero yo, diez millones de dólares si no voy a poder caminar?. 

Entonces el señor le dijo: Puedo darte cien millones de dólares a cambio de tus brazos. 

- El zapatero preguntó: Para que quiero cien millones de dólares si ni siquiera voy a poder comer solo. 

Entonces el Señor le dijo: ¿Puedo darte mil millones de dólares a cambio de tus ojos? 

El zapatero pensó poco y preguntó, ¿Para qué quiero yo mil millones de dólares, si no voy a poder ver a mi mujer, a mi hijos, a mis amigos?. 

Entonces el Señor lo miró y le dijo : Hay hermano, hermano que fortuna tienes y no te das cuenta, somos naturalmente ricos.

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