Al pobre le hablo de esperanza, y al rico de conversión. La esperanza salvará al pobre y la conversión purificará al rico. La esperanza del lado del pobre y la conversión del lado del rico, acercará a nuestros hermanos y yo vine a trabajar para ese encuentro y cuando todo se junte, no habrá cerraduras en las puertas, ni habrá fronteras. Entonces todos compartirán todo, por lo tanto reinará el buen humor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario